El cálido beso de una estrella solitaria [concurso]

Desde pequeña Tasi ha sido una chica muy enfermiza, por ello nunca pudo ir al colegio, nunca hizo amigos, sus padres se peleaban por ella y nunca conoció lo que era el amor.

El significado de la amistad o el amor para ella no era más que el sentimiento que tenía hacia sus padres. Ese mismo año, por su 15 cumpleaños a  Tasi le  habían regalado un telescopio.

Desde que tenía memoria siempre  había estado mirando las estrellas, igual que esa misma  noche en la que Tasi descansaba sus manos apoyadas en la barandilla de su  balcón desde  donde veía las estrellas todas las noches.

Brillantes puntos azules o blancos que se extendían por el cielo dándole color al firmamento.

Orgullosas estrellas que vivían en el cielo sin moverse por nada ni por nadie.  Ajenas al  sufrimiento de las personas de la Tierra, ajenas al sufrimiento que le  producía a Tasi verlas  extendidas por el firmamento burlándose de ella con aquella hermosa luz y libertad que ella  nunca tendría, pero a pesar de todo para ella era imposible odiar las estrellas, una vez que  salía al  balcón se quedaba horas absorta observando el  firmamento cubierto de  aquellos diminutos puntos de belleza que iluminaban la noche y le daban vida a las personas.  Tenía envidia de ellas, de aquella hermosa luz, de lo libres que eran, de que se tuviesen unas a las  otras, también sentía pena, aquellas estrellas tan bellas que casi nadie malgastaba su tiempo  para mirar el cielo y comprobar que seguían allí, que nadie se molestaba en preocuparse por  ellas. Pero de todas aquellas estrellas había una, una única estrella de entre todas aquellas con  la que se sentía identificada, no sabía el motivo, pero al ver a aquella estrella más pequeña que  las demás, más alejada de las demás y a su vez tan brillante como las demás… era diferente al  igual que ella.

Al igual que todas las noches Tasi cerró los ojos y extendió una mano al cielo, como si quisiese  llegar a las estrellas, volar con ellas por el cielo, sentir el frío de la noche y la cálida luz que las  protege. Su  respiración era lenta y entrecortada debido a las  lágrimas, como siempre sus  lágrimas se derramaban cuando contemplaba el cielo.

Entonces noto una suave brisa y como alguien entrelazaba su mano con la suya. Con las  lágrimas todavía corriendo por su rostro abrió los ojos sorprendida y ante ella se encontró a un  chico: brillantes cabellos dorados que  parecía que brillaban acompañado de una hermosa  sonrisa brillante como la luna que centelleaba en su pálida piel.

<< Todas las noches, todos los días te veo llorar intentando alcanzarme>>

Dijo el joven borrando la sonrisa de su cara mientras bajaba de la barandilla de un salto para  ponerse en frente a Tasi sin soltarle la mano.

Sin habla Tasi contemplo al joven asombrada, su fugaz mirada se dirigía a su cara con un toque  de pesar. Allí donde Tasi había tenido su mano extendida hacia aquella estrella solitaria pudo  contemplar que quela estrella ya no estaba en el cielo, y pudo comprender por qué.

<< Tu eres aquella estrella solitaria>> Dijo Tasi mirando los penetrantes ojos de la solitaria  estrella que ahora se había convertido en un joven.

<< Tu y yo somos iguales, solitarias estrellas que tratan de encontrar su propio brillo>> Dijo la  estrella limpiándole las lágrimas a Tasi.

<< Siempre me he dado cuenta de eso>>

<< Somos como locos amantes separados por grandes diferencias.>> Dijo la estrella agarrando  delicadamente entre sus manos la cara de Tasi

<< Amantes que no conocen el amor>> Dijo Tasi antes de recibir el cálido beso de su estrella  solitaria.

Con un leve aleteo Tasi fue abriendo los ojos, se encontraba tumbada sobre el frío suelo del balcón.

<< ¿Todo ha sido…un sueño?>> Se pregunto acariciándose los labios allí donde había recibido  aquel cálido beso. Lentamente dirigió su mirada al cielo nocturno, allí pudo ver a su solitaria  estrella brillar más que todas las demás estrellas y entendió que todo aquello no había sido un  sueño, tenía por amante la estrella más brillante del firmamento.

~Creado por... MacyC