Hello everybody!! Hoy traigo una entrada muy especial para mi y que forma parte de algo que hace mucho tiempo que no hago, y es compartir mis relatos.
Hace unos días, en una página sobre libros que sigo en facebook, me enteré de que organizaban un concurso de escritores. A pesar de la falta de tiempo por los exámenes, (ya terminé la vida del agua!!! bieeeeen!!) me anime a participar con un relato corto.
Los que me siguen desde el año pasado o más, sabrán que estuve en un taller literario y, algunas veces, compartía lo que salía de los ejercicios que mandaba hacer la monitora. Era muy divertido, pero había un máximo de líneas y a veces sentía que faltaba espacio para lo que quería contar.
Un día, la monitora nos dio una foto de un banco vacío, como los que hay en los parques, y nos propuso escribir sobre quién se acababa de levantar de ese banco.
De ese ejercicio nació una bonita reflexión, un chico llamado Sam que no logra encontrar el amor, en cuyo sufrimiento interior iban todos mis pensamientos...
¿Queréis leerlo? Pues os dejo el enlace a la publicación de facebook del relato.
¿Y por qué quiero vuestra ayuda? Pues resulta que el concurso se rige por el número de likes, y me da mucha pena los pocos que tiene mi relato... Aún así no os pido que le deis a me gusta sin que os guste. Pero si os gusta, os lo agradecería enormemente. Y si queréis compartirlo con vuestros amigos para que ellos le den a me gusta también... ¡pues mucho mejor!
[NOTA: Para que cuente hay que darle a me gusta de la imagen]
[NOTA: Para que cuente hay que darle a me gusta de la imagen]
Sé que es algo triste. Pero debéis saber que mi pensamiento a la hora de escribir este relato es que, a pesar del daño, Sam encontrará el amor verdadero, de casualidad, sin que él se lo espere. Y ese amor aceptará sus sentimientos y ya no tendrá que desechar más cartas ~♥
¡Espero que os guste el relato!
Besos y...
fly so high!